La M·E·S·A de la salud
La MESA de la salud es el acrónimo de las que considero las 4 patas de la mesa que representa el mejor cuidado de la salud:
M = Mente E = Ejercicio S = Sueño A = Alimentación
Cualquiera de ellas es indispensable para poder tener una buena salud, y si descuidamos alguna nunca podremos tener la mejor salud posible.
Me gusta que la primera letra sea la M de la MENTE porque creo que es la gran descuidada. Muchos son conscientes de que se están abandonando físicamente y le ponen solución, pero muy pocas personas son conscientes de que podemos mejorar nuestra forma de pensar.
La calidad de nuestra vida depende de la calidad de nuestro pensamiento: si tu pensamiento es triste tu vida es triste; si tu pensamiento es negativo tu vida es negativa…pero, también, si tu pensamiento es alegre tu vida es alegre y si tu pensamiento es positivo tu vida es positiva.
Hay muchos libros que ayudan a mejorar nuestra forma de pensar, algo que debería ser tremendamente demandado. Y, sin embargo, son muy desconocidos. Dale Carnegie, en el prefacio de su magnífico "Cómo suprimir las preocupaciones y disfrutar de la vida", describe muy curiosamente cómo fue a buscar en una biblioteca pública de Nueva York algún libro sobre cómo combatir las preocupaciones y se encontró con que sobre gusanos había 189 libros, mientras que de preocupaciones sólo había 22. O sea, casi 9 veces más libros sobre gusanos que sobre preocupaciones.
Además, cultivando y enriqueciendo continuamente la mente estamos potenciando la reserva cognitiva, que es una especie de plan de pensiones del cerebro para cuando llegue el deterioro cognitivo propio de la edad o por alguna enfermedad.
Luego viene la E de EJERCICIO, y me gustaría empezar recalcando que el ejercicio es maravilloso para cuidar de la salud cerebral. Son muchos los beneficios que el hacer ejercicio brinda a la salud corporal, pero iguales o mayores suponen los beneficios para la mente.
El ejercicio es el ansiolítico natural. Es en ansiolítico que tenemos incorporado de serie para bajar los niveles de ansiedad. Baja el cortisol y la adrenalina y sube las endorfinas, la dopamina y la serotonina. Es una pena que no se nos haya inculcado desde pequeños que aumentemos el ejercicio si está aumentando nuestro nivel de estrés.
Pero por desgracia en la consulta me encuentro con lo contrario: que cuando va aumentando por ejemplo el estrés laboral, las personas disminuyen el tiempo dedicado al ejercicio, con lo que el problema, lejos de irse solucionando, se va empeorando. Tengo que intentar convencerles de lo contrario con una frase tan absurda como ilustrativa: "no echo gasolina porque no tengo tiempo".
Después viene la S de SUEÑO. Nada más poco valorado y respetado como las horas que deberíamos dedicar para dormir. A algunos de los que hoy en día tienen problemas con el descanso nocturno les viene por haberlo descuidado en épocas pasadas.
Y aquí también hay que echarle parte de la culpa a que nadie en la época escolar nos insinuó siquiera que el sueño es uno de los pilares para gozar de mejor salud. Más bien al contrario, parecía que el que pudiera dormir menos iba a tener más tiempo de hacer más cosas.
A todos nos tenían que haber hecho aprender, antes que la lista de las capitales del mundo, las medidas de higiene del sueño. No debería ocurrir que alguien que tiene problemas de insomnio esté con el móvil o viendo la TV hasta última hora.
El cerebro necesita del sueño para organizar y afianzar toda la información que ha recibido durante el día para resetearse, para desintoxicarse y para desechar lo que debe eliminar. El robarle tiempo es como quitarle fruta al desayuno.
También aquí recurro a una frase muy ilustrativa: "no hace mejor examen quien llega con más ojeras". No por permanecer físicamente más horas en la oficina estamos siendo igual de productivos durante todas esas horas. La pena es que quien mejor debería conocer eso son los jefes, cuidando con interés del descanso de sus empleados.
Y por último y casi lo más importante es la A de ALIMENTACIÓN. Porque menuda importancia tiene la alimentación sobre nuestra salud. Se dice que somos lo que comemos (también que somos lo que pensamos) y mucha razón hay en ello, porque nuestro cuerpo es nuestro coche y lo que entra por la boca nuestra gasolina. Me gusta poner el ejemplo de un atleta olímpico. Tiene muy claro que en la olimpiada es donde tiene que darlo todo y exprimir su potencial al máximo. Por eso, ni se le ocurre saltarse la dieta que sus preparadores han seleccionado…supondría un peor rendimiento. Pues bien ¿acaso nuestra actividad diaria no es igual o más importante que la de un atleta olímpico?
Y si desde hace muchísimo tiempo se conoce y se intenta divulgar la relevancia de una adecuada alimentación, desde que se está conociendo la importancia emergente que tiene la microbiota (hasta hace poco llamada flora intestinal) ya el interés por cuidarla es mayor aún.
La microbiota es ese zoológico de gérmenes, fundamentalmente bacterias, que habitan en nuestro organismo, la mayoría en el intestino. Tenemos 10 veces más bacterias que células (solo que al ser de tamaño mucho menor por eso no son más visibles), y la carga genética en ellas es muchísimo mayor que la nuestra.
Son billones las bacterias que tapizan la pared intestinal, pared que en realidad es el muro de un foso que recorre todo nuestro cuerpo (si te tragas una canica por la boca la acabarás expulsando sin haber atravesado el intestino).
Al ser por tanto las paredes del intestino una muralla defensiva hay en ella muchísimos "soldados" (células inflamatorias), de cuya actividad pueden derivarse alteraciones que cada vez será más frecuente que oigamos: intestino permeable e inflamación crónica.
Éstas son sólo unas pinceladas de por qué cada vez se va a dar mayor relevancia aún a lo que decidimos introducir por nuestra boca. Por eso vamos a tener que informarnos y formarnos para conseguir realizar la mejor alimentación posible.
Así, pues, espero que estéis de acuerdo en que cuidar de los 4 componentes de la M·E·S·A de la salud -la MENTE, el EJERCICIO, el SUEÑO y la ALIMENTACIÓN- es indispensable para poder tener la mejor salud posible.
JDJ
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